Blogia
Selvio


EL MARTES:

<HR>EL MARTES: El martes fui a la video tienda, ahí estaba mi amiguito, el afeitadito, al verme se puso de pie e inmediatamente se bajó los pantalones para mostrarme lo que ya conozco muy bien de él, esa pija que parece salchichón la apretó hasta que se le paró lo suficiente para darle una suculenta apariencia comestible...

Antes de avalanzarme sobre él quise mirar en los demás asientos a ver si no había algún otro conocido, cuando volví estaba sentado, su verga estaba durísima, parecía el mástil de un navío con destino al placer, me acerqué y lo tomé con la mano, apretándolo suavemente, lentamente fuí acariciandole también las bolas...

Entonces y sin esperar otra invitación me incliné y como ya no aguantaba más acerqué mi boca, saqué la lengua y comencé a lamer ese glande inchado y brillante... ¡Que sabor más exquisito!

Se la chupé un buen rato, mi nariz llegaba cada vez más cerca de los troncos de sus vellos que apenas crecían después de un día de afeitados y su aspereza me excitó aún más...

Todo un manjar de carne dura y caliente dándole placer a mis manos, a mi garganta y a las fibras más íntimas de mi cuerpo que se morían de ganas de tener contacto directo con ella, pero ya lo conozco, a él sólo le gusta que se la mame...

Mi hormona estaba super revolucionada, mi verga goteaba líquido lubricante entre mi ropa interior, mi trasero sentía un cosquilleo supercachondo, yo lo levantaba en franca ofrenda para que cualquiera que pasara lo tomara, mi anillito se apretaba y se aflojaba como pidiendo a gritos que lo visitase alguna tranca mientras yo tenía la otra metida en la boca...

Se la sacudí un poco mientras daba un descanso mis mandíbulas que ya resentían el tiempo que llevaba lamiendo y chupándosela... sólo un par de segundos y de vuelta a lamerle los huevos y mientras mi cabeza se metía entre sus piernas y mi lengua se alargaba para alcanzar sus íngles y más allá... unas cuantas chupadas más y de esa deliciosa manguera de carne firme expulsó su contenido llenando mi boca con una cascada de exquisito y tibio líquido blanco que saboree y deseché despuescito en un rincón del casillero...

0 comentarios